jueves, 26 de noviembre de 2009

He aprendido a vivir de un modo simple y sabio

He aprendido a vivir de un modo simple y sabio,
mirar al cielo y rezar a Dios,
y dar largos paseos antes de que anochezca
para ahogar esta inútil ansiedad.

Cuando murmuran los espinos del barranco
y rojo y dorado cabecea el racimo del serbal
entonces compongo versos felices
sobre la vida breve, breve y hermosa.

Regreso. El gato peludo
lame mi mano y tierno ronronea.
y en la torrecilla del aserradero junto al lago
brilla la llama de una hoguera.

Rara vez turba el silencio
el grito de una cigüeña posándose en la casa.
- Y si a mi puerta llamaras,
creo que ni siquiera te oiría.

(Anna Ajmatova)

No hay comentarios:

Publicar un comentario